La Mtra. Sandra Ostrowsky, originaria de Madrid; España, mencionó que desde pequeña ha sentido el amor por la danza, y cuando se llegó la hora de ingresar al Conservatorio, simplemente lo hizo y desde ahí inició todo lo que ha construido.
Comentó que para ella todos los momentos artísticos que ha vivido tienen relevancia, «ayer se quedaría con la presentación del día de ayer, y hoy se quedaría con la de hoy»,
Resaltó que cuando terminó el Conservatorio se creó un punto de inflexión en su carrera, porque se sintió como en el borde de un «abismo», empezó a ver todo de otra forma, se generaron otro tipo de expectativas de las cuales tenía cierta percepción, encontró lo que le gustaba hacer y fue un gran cambio para ella.
Señaló que hoy ha hecho dos coreografías, una de ellas la ha montado su amigo, el Mtro. Eduardo Alves, y refleja su personalidad, trata de una loca en una sociedad donde quizás la mujer todavía no se desenvuelve como quisiera y plantea la idea de quién es el loco en este lugar, «soy yo por ser mujer o es la sociedad que me está creando loca», la otra la desarrolló con su compañera, la Mtra. Laura Juncal, piensa que se trata de la conexión de dos personas, quienes no se conocen y nunca han trabajado juntas, es como el máximo de una conexión real en forma de ser y moverse, «es como dos cuerpos unidos en uno»,
Sobre su actuación en el Festival Ibérica Contemporánea, expresó su gusto por haber bailado ante el público queretano, al cual calificó de conocedor y ferviente admirador del arte.
En su trayectoria profesional no tiene planes futuros, va por donde la vida le lleve, estará encantada de llegar a donde la vida decida.
Para finalizar, resaltó la importancia de que la gente asista a presenciar sus actuaciones dentro del Festival Ibérica, porque sin el público no son nada; además, con su arte pueden ayudar a la sociedad a olvidar sus problemas cotidianos.