La reconocida cantante española; Lúa Kalá, previo a su participación dentro del Festival “Voces: un encuentro entre el arte y el autismo”, a realizarse el próximo 2 de abril, de manera muy gentil nos concedió una entrevista, principió su intervención definiéndose como una chica “súper ñoña”, quien en realidad no tiene alguna rutina específica; sin embargo, en su día siempre da cabida al ejercicio, el entrenamiento de su voz; y, a la lectura, al menos lee de 60 a 70 páginas diariamente, aunado a lo anterior, precisó que en todo momento se encuentra presta al llamado desde su oficina por si se suscita alguna entrevista o presentación.
Como apasionada de las letras que es, actualmente está leyendo la novela “Orgullo y Prejuicio”; en este sentido, refirió que se encontró una versión inglesa; a la cual, simplemente, fue imposible resistirse, cabe señalar que su película favorita es “Orgullo y Prejuicio”, ¿Casualidad?, sí, siempre y cuando, las casualidades existan… Por cierto, al escritor que considera más relevante es el británico Charles Lutwidge Dodgson, ¿Quién?; Lewis Carroll (para los amigos), ni más ni menos que el creador de “Alicia en el país de las maravillas”.
Anne Sullivan, quien fungió como maestra de una reconocida activista sordociega del Siglo XIX, de nombre; Hellen Keller, es para Lúa Kalá, el personaje de la historia que posee mayor grado de notoriedad; bajo esta tesitura, la cantante sugirió darse la oportunidad de investigar más acerca de esta increíble mujer.
Además, Kalá, asiste de forma regular al gimnasio; incluso, desde hace algunos meses, se inició en el box, porque esta disciplina le encanta; no obstante, su atleta predilecta se ubica inmersa en una actividad deportiva totalmente distinta, se desempeña profesionalmente como patinadora artística, se trata de la pentacampeona europea; Carolina Kostner, a quien simplemente, Kalá no puede dejar de admirar.
La artista española tiene una canción propia favorita: “Expecting Miracles”; toda vez que, dicha pieza dio nombre, tanto a su más reciente material discográfico como a su último concierto, cabe destacar que dicha gala efectuada en “El Cantoral”, dio lugar a la presentación del disco antes citado, la canción mencionada al inicio, habla sobre esos milagros que pueden palparse en el ambiente; y en alusión a ello, comentó de manera textual lo siguiente: “Cada que la canto me crece el alma y me lleno de recuerdos y pensamientos increíbles. A pesar de ser una canción, más balada que el resto de lo que canto, tiene un carácter muy fuerte. Aparte, suena a Disney, y eso me encanta”. Si tuviese la oportunidad de regresar en el tiempo, sin dudarlo, reviviría la presentación de “Expecting Miracles” en la sala “Roberto Cantoral”, debido a que resultó ser un concierto increíble, en el que hubo intérpretes de LSM, “éramos un total de 16 artistas en el escenario, fue algo que me dejó sin aliento”, afirmó palabra por palabra.
Hizo resaltar que cantar siempre ha constituido su gran pasión (aunque no lo había concebido), se percató de ello, cuando se dio cuenta de que este arte une a todas las personas y les brinda la capacidad de comunicarse profundamente, aún sin hablar el mismo idioma. Dio a conocer que ha atestiguado los mejores movimientos musicales, por ejemplo: «We are the world» y los «Flash Mobs», considerados “famosos” hoy en día. En el instante que prestó atención a los músicos de la calle, reconoció que indubitablemente, son personas que atesoran una vasta riqueza; y pese a todo, en cualquier momento se muestran dispuestos a compartirla. “Eso me hizo desear siempre, poder ser igual de abundante y de compartida. Ahora sé lo que se siente poseer tanto y que no te duela compartir, al contrario; entre más compartes, más abundante eres”.
Cabe señalar que he donado conciertos a casi todos los centros penitenciarios de la capital mexicana, a casas hogar, a escuelas que atienden a infantes con bajos y altos recursos; y, a fundaciones; también ha iniciado jornadas de captación de PET, para que con la venta de este material, se adquieran lentes útiles para niños débiles visuales y de bajos recursos; asociado a lo mencionado anteriormente, citó de manera exacta lo consecutivo: “donamos parte de mi último concierto a niños del Congo, para poder ayudarlos a regresar de alguna forma a clases y anduvimos por los centros de acopio, tratando de hacer el día más ligero a los voluntarios que ayudaron después del temblor hace unos años. Sin embargo, te puedo decir con toda seguridad, que siento que apenas inicio y que han sido muy pocos mis granitos de arena, en comparación con lo que pretendo lograr algún día”.
Si le fuese posible elegir un recuerdo para que el olvido lo hiciera perdidizo, definitivamente, no elegiría tal oportunidad, puesto que cada lágrima, enojo, sonrisa, carcajada, tropiezo, regaño, error, etc., se los tiene muy merecidos, y los quiere, siente que cada segundo constituye parte de lo que es ahora; y todo lo que le integra, es algo que ama profundamente; en definitiva, para nada le estorban los aspectos que guardan sus recuerdos.
Bueno, quienes estén dando lectura a este texto, prometan ser confidentes y no divulgar que nuestra entrevistada es adicta a la comida mexicana; y, no conforme con lo anterior, también llora con todas las películas; pero, entiéndanla, es intensamente perceptiva y sensible, ya que dichas características son imprescindibles para constituirse como artista. No obstante, algo que se debe destacar en cuanto a la manera de pensar de Kalá, consiste en que por sobre todas las cosas, sitúa valores como la lealtad, el respeto y el amor.
Para no variar, por el simple hecho de ser mujer, se ha topado con diversos obstáculos tanto personal como profesionalmente, al llevar a cabo su proyecto musical, en correspondencia a lo señalado precedentemente, citó de forma textual lo sucesivo: “Ups. Ahora sÍ, agárrate, jajaja. Lo más difícil ha sido lidiar con la resistencia de quienes encabezan los principales puestos de difusión a escuchar música pensada; digamos, más planeada o menos burda. Por ejemplo, ha sido muy complicado que en alguna que otra estación de radio, pongan una canción mía en lugar de un reguetón, o la resistencia de algunas empresas que producen eventos, a experimentar cambios en la música con la que amenizan sus eventos. Esto nos ha llevado a crear una productora independiente, y para tener un pequeño lugar en el mercado, nos es mucho más complicado porque no pertenecemos al grueso de los artistas comerciales. Lo peor es que los géneros, algunas veces son tan cerrados que según «los expertos» y según su conveniencia, los artistas independientes sólo pertenecemos a su género cuando representamos ganancias económicas para ellos. Se han olvidado de la música como arte y como medio de expresión”.
Algo que le enorgullece mucho de su música, es que siempre, en colaboración con su equipo de trabajo, han sido muy cuidadosos a la hora de elegir y arreglar cada canción; es decir, tratan de que toda la música se rija bajo un mismo componente: que sea responsable. Justamente, porque al final del día, como intérprete, tiene la obligación de transmitir compromiso, y procurar que haya una intención clara en el mensaje. Para Kalá, es realmente significativo no limitarse a vender; por el contrario, la primordial finalidad es generar contenido edificante para los escuchas; y, dejar que comulguen con el mensaje, la letra, arreglos, instrumentos, y la intención misma de la voz.
“En la actualidad, mis canciones son totalmente dirigidas al amor, a la felicidad, a la comunidad, al deseo de ser alguien, pero sobre todo, mis shows están encaminados a todos aquellos que quieren ayudar y no saben cómo, o que creen que no pueden hacerlo. Trato de pensar mucho en lo que a mí me gustaría escuchar. Una historia, una anécdota o un poema; algo que me haga pensar. Que ponga en duda mis opiniones, que me enseñe algo. Teniendo en cuenta todo lo anterior y mi experiencia, dirijo mi música a todos aquellos que quieran escucharla. No quisiera que mi música se limitara a un núcleo».
Piensa que tanto la música como el arte en general son maneras de hacer política, pero también cree que dentro de la política hay una línea muy delgada entre la veracidad y la irresponsabilidad manipuladora y deshonesta. “Yo creo que todo en la vida es política: si salgo y negocio con el señor de la basura para que pase unos días en lugar de otros, si negocio con el señor del restaurante para que cuando sus clientes se estacionen, no lo hagan en rampas para personas con discapacidad. En fin, todos hacemos política todo el tiempo, sin embargo, también la música, el cine, el teatro, etc. o la misma fama de los artistas se presta para manipular a los menos favorecidos. Un factor importante es que cuando eres alguien conocido, tiendes a que las personas te crean, crean lo que dices y crean lo que crees. Esto requiere de mucha responsabilidad y creo que es algo de lo que, en su gran mayoría, carece la cultura del mundo en estos momentos – que ese arte, que lo que los artistas entreguemos, sea verificado por alguien con verdadero compromiso”.
Y después de todo lo ya abordado, ¿Cómo percibe la actividad de la sociedad mexicana con respecto al arte?: “Me encanta esta pregunta. He tenido la suerte de nacer en un núcleo familiar que me ha cobijado en estudios desde siempre. Mi padre siempre pensó que la mejor herencia que podría darnos a mis hermanos y a mí, era cultura general y una buena educación escolar, por lo que desde que recuerdo, siempre he viajado, asistido a museos, galerías, etc. He tenido la suerte de presenciar tanto en Europa como en América, los mejores espectáculos y, sin embargo, nada se compara con el legado cultural de los mexicanos. Creo que México, ha tenido la suerte de contar con gente talentosa desde el inicio de sus tiempos y eso es algo que no ha terminado, al contrario. Cada nuevo artista mexicano que conozco me sorprende más y lo mejor es que son artistas hechos y formados desde la niñez. México es un país de talentosos, creo que el único problema es cómo se ha gestionado el arte en México. Creo que eso ha mejorado poco a poco pero sigue siendo complicado. En lo que recae la mala gestión es en que se difunda -pseudo arte- y el verdadero arte, sólo asoma la cabeza de tan en tan”.
Por ahora, Kalá es partícipe en “La Voz Alemania” y “La Voz Suiza”, ha logrado salir avante, y competirá en la siguiente fase de eliminatorias, tanto en el certamen teutón como en el helvético; y, al menos teóricamente, debería estar de regreso en Europa a principios del mes próximo, pero a causa de la contingencia sanitaria que desafortunadamente nos aqueja, las siguientes etapas del concurso se van a posponer dos o tres meses. Derivado de esta situación, aún no recibe el aviso de cuándo deberá presentarse, por lo demás, al día de hoy, se encuentra trabajando en equipo para dar lugar a su nuevo álbum «Inefable». En general, ambos proyectos que por ahora le mantienen ocupada, también le colman de felicidad.
Para finalizar, remarcó que todo sueño le resulta ilusionante, el problema reside en que cada aspiración que materializa, se acompaña por otra, todavía más ambiciosa y atractiva. Aparte de que es una soñadora desmedida, todo le representa un deseo nuevo, pero repleta de satisfacción nos compartió un sueño que cumplió hace poco; y, le dejó una marca de gran magnitud, fue merecedora del premio “Lo Nuestro” a la voz revelación del año 2019; “ese es el tipo de sueños que pasan pronto y dejan una huella”.
