Tres mujeres completamente desconocidas que no tienen nada en común, aparentemente, esperan en la parada el autobús que las llevará al gritadero. El único lugar en donde está permitido gritar y externar emociones, pero la espera es lo único que las acompaña y a lo largo de esta se dan cuenta que comparten más de lo que imaginaban. Las tres son acechadas por un mundo que las amenaza y solo podrán hacerle frente juntas. Quizá el camión aún tarde en llegar.