El 24 de marzo de 1996 se consumó el descenso de Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) a la Primera «A» del balompié nacional, al perder en el llamado «Clásico del Descenso» frente al Monterrey; aunado a ello, su rival directo por la permanencia; el Club Atlético Morelia, no desperdició su oportunidad, y mantuvo la categoría por méritos propios, al vencer a los Tiburones Rojos del Veracruz.
Aquel día en el estadio Universitario, después del pitazo final, ya con el equipo de Tigres en la segunda categoría, se empezó a escuchar la canción de la diva pop italiana; Laura Pausini, corte de difusión dado a conocer por la artista en 1994, cabe recordar que este great hit se incuyo en su primer material discográfico en español.
Han pasado 27 años y esa melodía sigue presente en la mente de hinchas Rayados y Tigres, hasta hoy continúa intacto el recuerdo, se desconoce cuanto tiempo más, se recordará lo siguiente, cada 24 de marzo: “Se fue, me quedó sólo su veneno; se fue, y mi amor se cubrió de hielo; se fue, y la vida con él se me fue; se fue, y desde entonces ya sólo tengo lagrimas…”
