Redacción ACI Prensa
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump publicó el jueves una carta dirigida a “líderes y activistas provida” en la que indica su intención de promover prioridades legislativas y administrativas en favor de los no nacidos si es elegido para un segundo mandato.
“Mientras busco la reelección en noviembre, necesito su ayuda para contrastar mi audaz liderazgo provida con el extremismo del aborto de Joe Biden”, precisa la carta de Trump.
“El Partido Demócrata apoya inequívocamente el aborto a demanda, hasta el momento del nacimiento, e incluso el infanticidio, dejando que los bebés mueran después de abortos fallidos. La aceptación de Joe Biden de esta posición extrema se evidencia más en su apoyo al financiamiento de los contribuyentes para el aborto a demanda. Obligar a los contribuyentes a pagar los abortos es una posición abominable que hay que derrotar en las urnas”, agregó el presidente.
La carta del presidente se produjo mientras su campaña continúa tratando de obtener a los votantes provida, visto como un bloque de votantes crucial para la reelección de Trump.
En la Convención Nacional Republicana, varios oradores enfatizaron la oposición de Trump al aborto, incluido el Dede Byrne, cirujano y coronel retirado del ejército, quien llamó a Trump el “presidente más provida” en la historia de Estados Unidos.
A principios de esta semana, la campaña de Trump agregó apartados sobre el aborto y la libertad religiosa a su lista de prioridades para el segundo mandato. Una lista de 50 puntos de “prioridades centrales” fue publicada originalmente por su campaña el 23 de agosto y criticada por los provida por omitir la mención del aborto y la libertad religiosa en la lista original.
En su carta del 3 de septiembre, Trump escribió que si gana, “tenemos otros cuatro años para luchar en las trincheras por los niños por nacer”.
El presidente dijo que “trabajaría para” nombrar “jueces que respeten la Constitución y no legislen una agenda de aborto desde el tribunal”, que aprobarán tres leyes que restringirían o eliminarían el financiamiento del aborto y que “desfinanciarán por completo a la gran industria del aborto, como Planned Parenthood, de nuestros dólares de impuestos”.
Las leyes provida Pain-Capable Unborn Child Protection Act y Born-Alive Abortion Survivors Protection no fueron aprobadas en el Senado en febrero. Proyectos de ley similares no habían sido aprobados por el Congreso en 2015, 2017 y 2018. Los republicanos controlaban ambas cámaras del Congreso en 2017, pero no tenían los 60 votos necesarios para aprobar el proyecto de ley en el Senado sin un obstruccionismo. Se espera que el Senado esté cerca de una división uniforme después de las elecciones de 2020.
La carta de Trump señaló que había designado a varios jueces que debían oponerse a las protecciones al aborto, impidió la financiación federal de abortos en el extranjero y se dirigió a la Marcha por la Vida en persona, la primera vez que un presidente lo hacía.
El presidente también mencionó que había comenzado a cumplir las promesas de la campaña para retirar fondos de Planned Parenthood, a través de cambios en los fondos del Título X, los cuales impiden que los proveedores de servicios de aborto accedan a algunos fondos federales. Con el cambio de normas, el proveedor de servicios de aborto sigue siendo receptor de aproximadamente 500 millones de dólares anuales en reembolsos de Medicaid.
El mes pasado, la activista provida Lila Rose pidió al presidente que desfinanciara a Planned Parenthood de inmediato.
“El presidente Trump puede desfinanciar a Planned Parenthood por orden ejecutiva. Ya es hora de dejar de invertir millones de dólares de los contribuyentes en una corporación que mata a 900 niños cada día. Elimine el financiamiento de estas atrocidades”, tuiteó Rose el 26 de agosto.
Traducido y adaptado por Diego López Marina. Publicado originalmente en CNA.