En el Museo de los Conspiradores, se inauguró la exposición “Orgullo de mi país, Artesanía mexicana” de Arte & Cultura del Grupo SALINAS. En dicha exhibición se presentan un total de 65 obras realizadas por artesanos de 28 entidades federativas del país. Esta muestra será vigente hasta el 28 de febrero del siguiente año; entre tanto, el público podrá disfrutarla de martes a domingo de las 10:30 a las 18:30 horas, la entrada es libre.
En el acto protocolario, la titular de cultura del estado de Querétaro; Paulina Aguado Romero, destacó la presencia del director general de Arte & Cultura del Grupo SALINAS; Sergio Vela, a quien se refirió como una institución en el ámbito cultural; aunado a lo anterior, destacó la figura de la Mtra. Anne Delécole Silberling, gerente de Programación y Contenidos de Arte & Cultura; además, hizo resaltar que nuestra entidad es casa de este grupo que conglomera un importante número de empresas; y, fue enfática al afirmar que su secretaría está presta a generar sinergia con la organización antes referida, en sus trascendentales proyectos culturales; toda vez que, le hace sentir privilegiada el colaborar con Grupo SALINAS.
El director general de Arte & Cultura del grupo referido con anterioridad; Sergio Vela, hizo notar la vasta oferta museística que se ofrece en el estado de Querétaro; en este sentido, reconoció la importancia que posee el presentar “Orgullo de mi país, Artesanía mexicana” en el Museo de los Conspiradores, ya que este recinto hace recalcar uno de los pasajes esenciales de nuestra historia.
Esta exposición tiene una bella historia detrás, debido a que, el área denominada “Bienestar”, había desarrollado un proyecto relacionado a las fiestas patrias, llamado “Orgullo de mi país”; actualmente, a esta idea se le ha dado una dimensión mucho más ambiciosa, con el símbolo universal del corazón, se integró una colección muy selecta y creciente, encomendada a artesanos de los cuatro puntos cardinales del país, con todas las técnicas artesanales, y la finalidad de arraigar de forma significativa la tradición, las costumbres, los modos de ser, y peculiaridades culturales, de una nación sumamente compleja y mestiza como es México.
Recordó que cuando fue presidente del Consejo para la Cultura y las Artes (CONACULTA), con el gran amor que siempre ha tenido por México, se percató de las más de 50 lenguas originarias, y desarrolló una idea, con la cual, las técnicas artesanales expresen modos de ser a través de los materiales que se encuentran en cada zona del país, ya que cada región tiene sus propios materiales; y, consecuentemente, manifiestan la existencia de la diversidad geográfica y biológica con las distintas técnicas.
Señaló que tiene el firme propósito de dar cuenta de esta gran diversidad que hay en México, en torno al amor que se tiene por el país, pese a que, en ocasiones, nuestro México parece tener el corazón desquebrajado; sin embargo, con su arte y cultura, nos colma de orgullo por lo que somos y hemos acumulado.
Consideró una circunstancia muy afortunada que la inauguración de la exposición se diera un 8 de noviembre, porque hace 500 años en la Iglesia de Jesús Nazareno, se encontraron Moctezuma II y Hernán Cortés; por tal razón, esta fecha es señalada históricamente como el inicio de la mexicanidad; es decir, la unión mestiza de pueblos que llegaron en una enorme complejidad, pero que convirtieron a México en una enorme riqueza, a veces inasible e incomprensible, pero deslumbrante y maravillosa.
Manifestó su orgullo por dar esta muestra de México a un grupo selecto de cardiólogos mexicanos; además, recalcó la convicción de Grupo SALINAS por fomentar lo mejor de nuestro arte y nuestra cultura, para compartirla la sociedad. Reiteró su agradecimiento por el haber recibido las instalaciones del Museo de los Conspiradores para llevar a cabo esta exhibición; y, de esta manera, poder hacerla llegar al público, del cual espera, valore el mensaje que se quiere dar, y haga prevalecer el amor por México.
En la ceremonia de apertura también estuvieron presentes; Pedro Iturralde Torres, presidente de la Sociedad Mexicana de Cardiología; Arturo Mora Campos, director de Difusión y Patrimonio Cultural de la Secretaría de Cultura del estado de Querétaro, y Christian Ernesto Arredondo Carrasco, coordinador del museo.
A continuación se mencionan algunos de los artesanos que son partícipes de “Orgullo de mi país, Artesanía mexicana”:
- Francisco “Chico” Coronel Navarro (Onalá, Guerrero): Quien después de aprender el oficio de su abuelo y sus padres, rescató en la década de los setentas, la fina técnica del laqueado con hoja de oro y plata.
- Alfonso Ponce Monroy (Pátzcuaro, Michoacán): Desarrolla una forma de tallar la madera que es típica de los artesanos de esa entidad, la madera debe estar completamente seca para quitarle desperfectos y nudos mediante buriles y formones. El diseño se pasa a la madera para grabarla con distintas herramientas, se pueden utilizar navajas, gubias o cuchillos; posteriormente, se da paso al pulido con cepillos y lijas; finalmente, se aplica un barniz para brindar protección a la madera. Las piezas mantienen su color natural, con el firme objetivo de que se aprecie de mejor forma el trabajo grabado.
- Manuel Jerónimo Reyes Ceja (Santa Fe de la Laguna, Michoacán): Aprendió de su abuelo y su madre el arte del barro vidriado, de estas valiosas personas heredó los moldes para hacer sus asombrosas piezas. Para iniciar su proceso artesanal, se vale de una arcilla hecha de barro rojo y blanco.
- Arturo de la Cruz y Martín Julián Magaña Negrón (Muna, Yucatán): la obra de estos artesanos, hace recordar que fueron los mayas mesoamericanos, quienes iniciaron el proceso de labrar el jade, desde 1000 años A .C., dicha actividad la desarrollaban con fines ornamentales, funerarios, rituales, etc. Entre los muy diversos minerales que manipulaban los pueblos mesoamericanos, el jade era el más preciado, incluso más que el oro. Para ellos, representaba el agua petrificada y la vida que trasciende la muerte, en general, encarnaba un símbolo de eternidad en el que se concentraban las máximas fuerzas divinas, por lo que acompañaba a los personajes de la élite en el instante de su muerte.
- Martín Cruz González (Tequisquiapan, Querétaro): Este artesano desarrolla de forma destacada objetos de mimbre; primeramente, debe idear el diseño; enseguida, selecciona la fibra con la que trabajará, desde muy temprano la prepara, la humedece para manejarla sin que se rompa.
- Rosa Margarito (San Idelfonso, Amealco, Querétaro): Sin duda los bordados de origen mexicano, son obras pertenecientes al arte popular que reflejan de una forma muy significativa la biodiversidad. Las damas del pueblo otomí, aprenden desde muy temprana edad a medir y cortar hilos, con el fin de realizar bordados de hilván, cabe hacer notar que esta labor se hereda de generación en generación; habitualmente, la iconografía plasmada en sus piezas, alude a la fauna y flora de la zona.
- Marina Mex Cauich (Felipe Carrillo Puerto, Quintana Roo): El trabajo con fibras vegetales, en particular la llamada caña brava, es una de las artesanías con mayor arraigo en esta entidad, ya que el bejuco es un producto que lleva intrínseco un relevante legado cultural maya.
- Javier Jaime Huerta Hernández (Santa María del Río, San Luis Potosí): Cabe acentuar que la taracea es una técnica llegada a la Nueva España desde tierras andaluces. Se extendió por diversas zonas del país, distinguiendo los estilos propios de cada época: renacentista, rococó, neoclásica, etc., con una tenue atribución indígena.
