El Fútbol Club Barcelona está fuera de la disputa por el título en La Liga, sólo Atleti y Real Madrid continúan enfrascados en la disputa, pero la derrota culé sólo hizo notar con mayor intensidad el acabose del equipo de Koeman; toda vez que, un resultado favorable hubiese sido insuficiente, puesto que sus oponentes directos salieron victoriosos en sus respectivos compromisos.
Aunque el inicio del partido no resultaba del todo adecuado para la visita, debido a que durante el calentamiento; Joseph Aidoo, sintió molestias que forzaron al profesor Coudet a prescindir de él, y enviar al terreno de juego a Carlos Domínguez.
El cotejo dio principio con un entusiasta Blaugrana volcado al frente, pero no logró generar oportunidades de riesgo ante la meta de Iván Villar. Incluso, el francés Antoine Griezmann, tuvo un mano a mano frente al cancerbero visitante; el cual, no se venció, y a 10 minutos de haber comenzado las hostilidades, el tanteador se conservaba sin movimientos.
El tenor del partido no variaba; y, al minuto 28 de acción, el estelar del FC Barcelona; Lionel Messi, aprovechó una buena jugada de Sergio Busquets, para enviar la de gajos al fondo de las violas.
Sin embargo, el contento del club catalán no duró más que diez minutos, porque al 38′, un potente disparo lanzado desde la frontal del área grande, en el primer acercamiento de riesgo por parte del Celta en el cotejo, dejó viendo visiones a Marc-André Ter Stegen, quien se exhibió imposibilitado de seguir el curso de la esférica, debido a que Gerard Piuqué estorbó, por tal razón, el envío del hijo pródigo vigués; Santi Mina, terminó en la igualada a un gol por equipo.
Restaban 20 minutos para culminar el enfrentamiento, cuando Koeman se mostró deseoso por modificar el comportamiento de su escuadra; derivado de ello, envió al campo a Francisco Trincao y Martin Braithwaite, de inicio, la intención no parecía cumplir el objetivo, pero cinco minutos después, el escenario sufrió una modificación para bien, aunque ligera resultaba útil, en el Wanda Metropolitana, el Club Atlético Osasuna se iba adelante, situación que permitía al Blaugrana soñar con el título, debido a que los números aún indicaban que podía alzar la copa; sin embargo, la inoperancia catalana no cesó.
El contexto empeoró cuando Lenglet vio el cartón amarillo por segunda ocasión; y, debió abandonar el terreno de juego al minuto 83; seguidamente, el Colchonero remontó al cuadro de Pamplona.
Santi Mina, decretó el marcado final de 2 goles contra uno a favor del Celta de Vigo, cuando batió la meta local a falta de un minuto para concluir el tiempo reglamentario. A raíz de lo sucedido, el Barcelona de Koeman está eliminado en La Liga, mientras tanto, el Merengue debe ganar, sí o sí, en su último duelo, porque si no lo hace, inmediatamente sería campeón el Atleti, aunque perdiera su compromiso.