La postura que había dejado notar el Fútbol Club Barcelona provocó en los representantes de Messi ciertas discrepancias, a causa de ello, debieron velar por los intereses del futbolista.
Hoy por hoy, la entidad blaugrana no podía garantizar al estelar la capacidad suficiente para inscribirlo en la competencia; y obviamente, el futbolista rosarino no se podía permitir tener un futuro incierto a estas alturas del verano, de ninguna manera podría dejar pasar el tiempo y llegar al 31 de agosto sin haber firmado con un equipo, sobre todo considerando que el año entrante se disputará el mundial de la especialidad en Qatar.
No hay fecha que no se llegue y plazo que no se cumpla, ambas partes deberán tomar rumbos distintos de aquí en adelante
Quienes se enteraron primeramente de la situación fueron los capitanes del primer equipo, ya habían sido informados de la severa dificultad para hacer viable la conservación de Messi en el roster, por tal razón, tendrían que verse en la penosa y complicada necesidad de prescindir de sus servicios a partir de la siguiente temporada.