La audiencia se reanudó, con la defensa de Djokovic argumentando que el Grupo Asesor Técnico Australiano sobre Inmunización (ATAGI) del gobierno federal, incluyó disposiciones sobre infecciones pasadas en sus pautas de vacunación.
Djokovic había registrado una infección por COVID19 en diciembre, que fue la base de su solicitud de exención médica de la vacunación.
En la audiencia, los abogados de Djokovic señalaron las pautas de ATAGI publicadas en diciembre que reconocían «que la inmunidad natural fluye de una infección pasada», dijo Nick Wood, abogado principal.
Las pautas de ATAGI resaltan dos dudas: el desafío de confirmar que alguien realmente ha tenido una infección anterior y la incertidumbre de cuánto tiempo podría durar esa protección, dijo Wood.
«Pero está muy claro que ATAGI señala que haber tenido una infección anterior proporciona, sujeto a dudas sobre la duración, inmunidad natural. Las pautas también sugieren que una infección pasada brinda al menos seis meses de protección natural, «y por lo tanto puede considerarse una excepción temporal a la vacunación por un máximo de seis meses», comentó el jurista.
Sin embargo, pautas también especifican claramente que, a pesar del reconocimiento de la protección natural, una infección pasada «no es una contraindicación para la vacunación», lo que significa que no es una razón válida para que alguien no se vacune.
