El dirigente nacional del PRD ha arremetido contra Marcelo Ebrard, exjefe de Gobierno de la Ciudad de México, por el desplome de un tramo elevado de la Línea 12 del Metro. Una postura que contrasta con su asistencia a la inauguración de este obra
Jesús Zambrano, dirigente del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y quien participara en la inauguración de la Línea 12, culpó este martes al Canciller Marcelo Ebrard, exjefe de Gobierno de la capital, y a Mario Delgado, actual dirigente de Morena y exfuncionario de la Ciudad de México, por el accidente de esta línea ocurrido la noche del lunes en un tramo elevado cercano a la estación Olivos, el cual ha dejado 24 fallecidos y cerca de 70 heridos.
«La corrupción es la causa del desplome de la Línea 12 del Metro, misma que se dio durante el Gobierno de Marcelo Ebrard , siendo Mario Delgado su Secretario de Finanzas.
Es una obra que tuvo problemas desde su construcción e inauguración», señaló Jesús Zambrano Grijalva a través de un comunicado de prensa en el cual denunció los malos manejos en torno a esa obra.
No obstante, Zambrano omitió hablar sobre su asistencia en la inauguración de esta Línea 12, la cual tuvo lugar el 30 de octubre de 2012.
En ese entonces, él se desempeñaba como presidente nacional del PRD, al igual que ahora. Las fotografías de aquel entonces lo muestran en un lugar de honor, entre los personajes que cortaron, de manera simbólica, el listón que dio el banderazo de salida.
Posó junto al propio Marcelo Ebrard, quien entonces era el Jefe de Gobierno del Distrito Federal, y su esposa Rosalinda Bueso. Él fue el único dirigente de un partido en esa primera fila.
Además de Jesús Zambrano, en el corte del listón estuvieron presentes el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, líder moral de la izquierda; el entonces Senador Armando Ríos Piter; Miguel Ángel Mancera, quien por esas fechas era el Jefe de Gobierno electo de la capital, así como el empresario Carlos Slim Helú, Bernardo Quintero, e incluso el embajador de EU en México Earl Anthony.
Al acto también acudió, aunque sólo por unos instantes, el Presidente Felipe Calderón.
Ebrard Casaubon agradeció a los diputados y senadores, en particular a los del PRD, Movimiento Ciudadano y Partido del Trabajo (PT), que apoyaron al Gobierno del Distrito Federal a tener recursos por más de 14 mil millones de pesos.
«También quiero darle las gracias, y por eso está el día de hoy aquí, además de ser esta una obra nacional, al Presidente Calderón, porque nos faltaban dos mil millones de pesos y él ordenó que se incorporaran al presupuesto», dijo durante la inauguración.
Semanas después de esa postal, y a horas del inicio del Gobierno de Enrique Peña Nieto, Zambrano firmaría el 2 de diciembre de 2012 en el Castillo de Chapultepec, junto a Gustavo Madero Muñoz, Presidente del Partido Acción Nacional (PAN), Cristina Díaz Salazar, presidenta interina del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y el propio Presidente entrante, el llamado Pacto por México, un acuerdo desde el cual estas tres fuerzas respaldaron el proyecto político de Peña Nieto, el cual contempló una serie de reformas estructurales, entre ellas la Energética, cuya aprobación en 2013 ha salpicado a legisladores panistas por el supuesto pago de sobornos relacionados con la trama de corrupción de Odebrecht.
El hecho de que Zambrano suscribiera el Pacto por México dio pauta a toda una restructuración dentro del PRD, en la cual el partido perdió a sus principales líderes políticos como fue el caso de Andrés Manuel López Obrador, quien en junio de ese 2012 fue el candidato presidencial del Sol Azteca.
No obstante, la conformación de este acuerdo político lo llevó a salir del partido que dirigió entre 1996 y 1999, que lo llevó a la Jefatura de Gobierno del DF en el 2000 y que lo abanderó en dos ocasiones (2006 y 2012) en la carrera presidencial.
«Dejé de ser militante del PRD porque los dirigentes de ese partido apoyaron a EPN en el llamado ‘Pacto por México'», señaló el propio López Obrador en junio de 2014 a través de una publicación en su perfil de Facebook.
La misma ruta la seguirían otros líderes de esta fuerza política. El ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas haría lo propio en noviembre de ese año.
Cuatro años después se separaría de ese proyecto otra fundadora: Efigenia Martínez.
LA RUPTURA CON EBRARD
La «línea dorada» inició su marcha en octubre de 2012 en la estación Parque de Los Venados. El recorrido de la Línea 12 abarca las alcaldías Tláhuac, Coyoacán, Benito Juárez, Xochimilco, Milpa Alta, Álvaro Obregón e Iztapalapa.
Luego del banderazo de salida y en menos de dos años comenzaron sus problemas. En marzo de 2014, la obra que costó 26 mil millones de pesos, descarriló.
Fue entonces que se dieron a conocer una serie de irregularidades que la volvieron inviable para funcionar y se anunció la suspensión en 11 de las 20 estaciones.
Luego de más de un año y ocho meses parada, reabrió en su totalidad el domingo 29 de noviembre de 2015.
Para ese entonces, el Gobierno de Miguel Ángel Mancera había emprendido una serie de acciones contra la gestión de Marcelo Ebrard que salpicaron a un puñado de funcionarios, entre ellos Enrique Horcasitas, exdirector del Proyecto Metro (PMDF), fue inhabilitado por 20 años.
En ese sentido, Zambrano Grijalva deslindó de estas irregularidades al actual Senador perredista, Miguel Ángel Mancera Espinosa, quien fue el sucesor de Marcelo Ebrard en el Gobierno de la capital del país, pese que a lo largo de su mandato se dio mantenimiento a esta línea, incluso a finales de 2017 el director del Metro de esta administración, Jorge Gaviño, aseguró que se había revisado con rayos X y ultrasonido «todas las columnas» para revisar las condiciones «de todas las estructuras» de esta obra.
«Cuando entra Mancera a sustituirlo revisa todo lo del estado financiero del Metro. Estaba prácticamente en quiebra y además con severos problemas estructurales de curvas mal planeadas, de desgastes enormes de las vías del tren y de las ruedas mismas del tren que son metálicas en toda esa línea y tuvo que suspender la operación, Mancera, del Metro durante una buena cantidad de meses», mencionó Zambrano este martes.
En el marco de las investigaciones, Ebrard pidió a Mancera, en septiembre de 2014, un debate público sobre las irregularidades en torno a esta obra, algo que nunca ocurrió.
Lo que sí tuvo lugar, fue una investigación en la Cámara de Diputados por parte de una comisión especial, instancia en la que en enero de 2015 se pidió a la PGR indagar la responsabilidad del exjefe de Gobierno junto sus colaboradores a Mario Delgado y Enrique Horcasitas.
No obstante, Ebrard no fue condenado en ninguna instancia.
Luego de ello tuvo lugar una comparecencia de Marcelo Ebrard -a petición de él mismo- en la Cámara de Diputados. Fue así que el 9 febrero de 2015, cuando ante la Comisión Especial de Seguimiento al Ejercicio de los Recursos Federales de la Línea 12 del Metro Ebrard sostuvo una reunión de trabajo, en la que también estuvo presente Mario Delgado, quien en ese entonces era Senador del PRD.
«Necesitamos menos política y más responsabilidad», dijo Ebrard en aquella ocasión tras una intervención de alrededor de 15 minutos.
A finales de ese mes, y tras una disputa con Jesús Zambrano ocurrida a finales de 2014 por la dirigencia del partido y ante la negativa del Sol Azteca de darle una candidatura a Diputado plurinominal para las elecciones federales del 2015, Ebrard renunció a su militancia del PRD.
Ante este panorama, el ahora Canciller dejó el país y se refugió en Francia, de donde proviene, y luego en Estados Unidos.
Tres años después, en febrero de 2018, Ebrard regresó al país tras ser nombrado coordinador para la defensa del voto por Andrés Manuel López Obrador en la campaña de ese año.
«Yo soy de los pocos políticos mexicanos que ha tenido fuego amigo y fuego enemigo al mismo tiempo», dijo al ser abordado por reporteros. Ahora, de nueva cuenta, su nombre junto al de Mancera son mencionados por la prensa en relación a lo ocurrido con la Línea 12, ante lo cual ambos aseguran que responderán, de ser necesario, ante las autoridades.
MS.
