«Henkel condena la guerra rusa contra Ucrania y la violencia contra civiles inocentes. Nuestra prioridad sigue siendo hacer todo lo posible para apoyar a nuestros colegas en Ucrania. En el contexto de los desarrollos actuales de la guerra en Ucrania, Henkel ha decidido abandonar sus actividades comerciales en Rusia. Ahora trabajaremos de cerca con nuestros equipos en Rusia en los detalles para garantizar un proceso ordenado. Estamos brindando un amplio apoyo a nuestros empleados y a la gente de Ucrania y los países vecinos al ofrecer donaciones financieras, así como donaciones de alimentos y materiales. Muchos empleados de Henkel también están ayudando en las fronteras distribuyendo productos que se necesitan con urgencia u ofreciendo a las personas de Ucrania un lugar para quedarse», informó en un comunicado el CEO de Henkel; Carsten Knobel.
La empresa citada reiteradamente, con sede en Düsseldorf fabrica diversos bienes de consumo, como productos de lavandería y limpieza. Sus 2,500 empleados en Rusia seguirán siendo empleados y remunerados, dijo Henkel. Por ahora, la organización no comentó al respecto de una perspectiva sobre cómo esta situación impactará en sus finanzas.
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