Malala Yousafzai, Premio Nobel de la Paz 2014, en conversación con la periodista Lydia María Cacho Ribeira, hizo saber que espera a la brevedad de lo posible visitar América Latina, y por supuesto México.
Recalcó que pasar tiempo con su familia es algo que valora en demasía, también gusta de leer libros; y, pese a no contar con momentos extensos de descanso, disfruta convivir con sus amigos; y obviamente, poder estar con ella misma también le resulta sumamente importante.
Cabe recordar que la reconocida activista pakistaní obtuvo su grado en filosofía, política y de economía por la Universidad de Oxford en junio del año en curso, al respecto, destacó que durante los tres años que estuvo en la prestigiosa institución antes referida, conoció a personas muy diferentes y valiosas, estuvo colmada de trabajo, pero desarrollo un alto sentido de responsabilidad e independencia; en general, constituyó un cambio verdaderamente significativo en su vida.
Yousafzai trajo al presente su adolescencia, específicamente cuando era una joven de quince años, porque en aquel entonces, sólo atesoraba 9 libros como máximo. No obstante, a la fecha se ha convertido en una ferviente lectora, derivado de lo anterior, remarcó haber leído diversas obras que han generado un profundo interés en ella, por citar algunos títulos: «El Alquimista» de Paulo Coelho y «Rebelión en la Granja» de George Orwell.
Asimismo, puntualizó que ha constatado el uso de la fuerza para intentar silenciar, pero sugirió no dejarse amedrentar y alzar la voz; toda vez que, sólo de esta forma se propiciara un cambio en la comunidad, de igual manera, aprovechó para hacer resaltar que el aprendizaje empodera, y tanto el conocimiento como la educación son cruciales en la vida.
La defensora de los derechos civiles, recordó que entre 2007 y 2009, un grupo terrorista tomó el control de la ciudad donde residía e hicieron modificaciones forzosas que privaban de varios derechos a la ciudadanía, principalmente a damas e infantes; inclusive, destruyeron 400 escuelas, en relación a ello, Malala se mostró sincera en que no permitiría que estos sujetos eliminaran su deseo por estudiar, ya que no únicamente dejaban a niñas y niños sin saber leer y escribir, de forma tajante les estaban quitando su futuro. Derivado de lo anterior, Malala se decidió a escribir un blog para la BBC en 2009, dicha actividad debía efectuarla cuidando al máximo su integridad, razón por la cual, utilizaba un seudónimo, en su sitio la activista relataba sus vivencias bajo la opresión de los talibanes, y como estos individuos intentaban tomar el control a plenitud, además, se empecinaba en hablar sobre la tierra, los problemas, la promoción de la educación (especialmente de las niñas), etc., aunque había momentos en que sentía la indiferencia de la gente, ella se mostraba insistente, puesto que siempre ha estado totalmente convencida de sus objetivos y comprometida con su visión.
En este punto, se pondera relevante mencionar que en 9 de octubre de 2012, a la edad de 15 años; Yousafzai fue víctima de un atentado perpetrado por el por el Movimiento de Talibanes Pakistaníes, por tal razón, fue trasladada de emergencia a un hospital y posteriormente llevada a Inglaterra para continuar con los tratamientos requeridos. La causa del ataque contra la joven fue su férreo activismo opositor al control talibán que prohibía entre otras cosas, la educación de las niñas.
Al considerar de vital importancia escuchar a la gente, reflexiona sobre lo trascendente que es compartir sus historias, mensajes y propósitos para dar lugar a una mejor humanidad. Bajo esta tesitura, acentuó su agrado al ver que la juventud se ocupa en cuestionar y trabajar para dar soluciones, ya que hay varias situaciones que requieren atención, como son las emisiones de carbono, el uso de energías no renovables, las deficiencias en el sistema educativo, etc.
Aprovechó para aconsejar de manera franca y contundente a las jovencitas, les hizo saber que bajo ninguna circunstancia pueden dejar de pensar en ellas mismas; y, por encima de todo, creer en su potencial y voz, defender sus derechos, sensibilizar a la sociedad, leer contenido edificante y generar unidad, porque si actúan así, se encontrarán en el escenario más viable de hacer crecer su mensaje exponencialmente. Enfatizó en que las damitas tienen que afanarse en erradicar la discriminación, la ignorancia y el extremismo, cambiando tópicos y discursos.
A raíz de la situación adversa que predomina por la contingencia sanitaria del Covid19; Malala Yousafzai, se ha visto forzada a posponer algunos planes, entre ellos, viajar a la India para enterarse de primera mano sobre los trabajos ejecutados por su fundación en aquel país, de igual manera, hizo hincapié en que le gustaría visitar nuestro país para conocer gente interesante.
Al presente, la reconocida defensora de la educación, refiere que no puede descansar hasta que no haya igualdad de género, reducción de pobreza, y se incremente el acceso a la educación, sueña con que todos los infantes tengan lugar en los niveles de primaria y secundaria. En este sentido, añadió que aguarda y se esmera por la igualdad, el trato de la persona como individuo en una sociedad inclusiva que priorice la vida en paz sin conflictos.
Enseguida, sintetizó sus tres obras literarias: «Yo soy Malala», «Todas somos desplazadas» y «El lápiz mágico de Malala». La autora tomó tiempo para hablar sobre libro mencionado en segundo orden; el cual, relata diversas historias, incluyendo algunas que versan sobre jóvenes que conoció durante sus travesías, quienes por varias circunstancias perdieron a su familia y el mundo que conocían, puesto que en épocas de crisis y conflictos millones de personas han sufrido la separación; no obstante, deben prevalecer sus derechos humanos universales.
Para finalizar; Malala Yousafzai, apuntó que tiene un cúmulo importante de ideas a raíz de su bagaje cultural tan amplio, pero hoy por hoy, no tiene previsto escribir un libro.
