Stoke City no tuvo más el balón que el Wigan, es una realidad, pero fue muy superior a la hora de ir al frente, y po encima de todo, defendió de buena forma su arco, al solo permitir que la visita tuviera 2 inatentos directos a puerta en todo el duelo.
Josh Mja al 14′ y Jacob Brown marcaron los goles definitivos del partido. En 19 oportunidades buscó la meta rival el Stoke pero solo 5 tuvieron dirección de gol; y convirtió dos de ellos.