Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, durante la ya clásica «mañanera» destacó lo siguiente: “Siempre tengo presente lo que le hicieron a Madero, un hombre bueno: la prensa lo acabó”.
Derivado de lo anterior, precisó que tanto a él como a su hermano Gustavo Madero, nunca los perdonaron; y, Gustavo fue asesinado de la manera más cruel, le arrancaron el único ojo que tenía, una tremenda infamia que dio lugar a uno de los peores episodios de de la historia nacional. En este punto, el mandatario mexicano recordó cuando Gustavo Madero dijo que a su hermano «le muerden la mano a quienes les quitó el bozal».
Ningún presidente fue atacado como Francisco I. Madero, lo atacaban periodistas e intelectuales que se volvieron huertistas, situaciones como esa constituyen experiencias para saber cómo se resiste y llevan a cabo los cambios, para que no siga imperando el antiguo régimen de explotación, privilegios y corrupción, por tal motivo resulta imperante trabajar con el pueblo.
El presidente Madero quien era un hombre bueno, muy bueno, no pudo o no quiso hacer un acuerdo con los campesinos para tener la base social y dar lugar a una transformación.
Por tal motivo, durante su conferencia de prensa en Palacio Nacional; López Obrador, celebró la asistencia de quienes coordinan sus programas de bienestar porque son un pacto con el pueblo, toda vez que, dan las becas, pensiones, impulsan la educación y el desarrollo social.
Emanado de lo citado anteriormente es que el presidente de la República tiene al apoyo de la gente, según hizo saber el propio titular del Ejecutivo federal, quien añadió que jamás traicionará al pueblo. También aseguró no tener apego al poder, porque éste solo se convierte en virtud cuando se pone al servicio de los demás. «El poder es humildad y poder decir adiós en su momento. Y también no todo el que tiene es malvado, hay quien ha hecho su patrimonio con esfuerzo y trabajo en conformidad con la ley y merece respeto».
Para concluir su intervención, el presidente hizo notar que le indigna la corrupción y la riqueza mal habida.
