Segundo derbi de la temporada y el segundo que tuvo como escenario el Benito Villamarín. Tras superar al Córdoba, el Andratx y el Zaragoza, el bombo quizo que el primer rival de la máxima categoría que se encuentre el Sevilla FC en el torneo esta temporada sea nada menos que su vecino, a partido único y fuera de casa. Así se presentaba un partido en el que, inevitablemente, las referencias del choque liguero son tan cercanas en el tiempo como lejanas en la influencia que podían ejercer sobre los 90 minutos -o los que hubiesen sido necesarios- esta noche. Y es que se enfrentaban el segundo y el tercero de LaLiga Santander en la que, sin duda, debía ser la eliminatoria más atractiva de todas las que componen los octavos de final.
No fue hasta que el equipo sevillista llego a Heliópolis cuando se puedo comenzar a encajar las piezas en una semana en la que el equipo ha trabajado lejos de los focos y centrado en mantener la espectacular dinámica que ha arrastrado en 2022, con tres victorias consecutivas y ni un solo tanto encajado. Con los tres internacionales marroquíes en Camerún y la duda de si Koundé ha superado las molestias derivadas de su mala caída ante el Getafe, Julen Lopetegui tuvo que volver a sobreponerse a la dificultad. Eso sí, desde ayer contó con un nuevo efectivo en la persona del mexicano Tecatito Corona, quien ingresó en su primera lista como nervionense, pero no ingresó al campo.
Los verdiblancos, que intentarían romper la racha de los últimos años en los derbis, llegaban a la cita con las ausencias confirmadas de Bartra y Willian José y con el alta del senegalés Sabaly, prácticamente inédito por lesión desde su llegada el pasado verano. Tras superar al Alicante, el Talavera y el Valladolid en las tres primeras rondas, querían, como el Sevilla, meterse entre los ocho mejores y ser el único equipo hispalense candidato a disputar la final en La Cartuja. A pesar de haber sumado solo uno de los últimos nueve puntos ligueros, el Betis cuenta con su fortaleza como local. Eso sí, los números históricos del Sevilla FC en el Villamarín son levemente más favorables para el visitante hoy.
El colegiado, cuya designación fue más noticia de lo habitual durante la semana, se trató del vasco Ricardo de Burgos Bengoetxea. Un colegiado con el que el balance sevillista es de ocho victorias, dos empates y cuatro derrotas. Esta temporada le ha pitado las victorias en Vigo ante el Celta y en casa ante el Atlético, mientras que en la Copa será la tercera ocasión. Las dos anteriores también fueron victorias, en 2016 ante el Mirandés y ante el Cádiz en 2018, ambas en Nervión. En cuanto al Betis, son más los precedentes al coincidir ambos en Segunda, con 12 victorias, un empate y seis derrotas. Este año les pitó en casa ante el Rayo (3-2) y en la última ronda copera en Valladolid (0-3). En el VAR estuvo el castellanoleonés José Luis González González.
El partido comenzó con grandes expectativas, el ex Atalanta Bergamasca Calcio; Papu Gómez, mandó a guardar el esférico al 30′; sin embargo, los locales empataron al 39′ por conducto Navil Fekir.
Pero el duelo ha sido suspendido en el Benito Villamarín luego de que un objeto arrojado al campo impactara contra Joan Jordán al 44′; y la RFEF informó que se ha suspendido el partido de octavos de final de Copa del Rey entre el RealB etis y el Sevilla FC. Toda vez que, la RFEF condena todo acto de violencia en los terrenos de juego.
