Sara Castrejón, primera fotógrafa de la Revolución Mexicana, fue recordada durante la «mañanera del pueblo» de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, específicamente en el apartado «Mujeres en la historia».
El 26 de abril de 1911 un contingente maderista tomó la plaza de Teloloapan, Guerrero, donde transitaban las mercancías entre Tierra Caliente e Iguala, y el registro fotográfico de este levantamiento fue llevado a cabo por Castrejón, quien también cuenta en su acervo con un retrato de la coronela Amparo Salgado.
La artista mencionada reiteradamente, nació el 16 de agosto de 1888 en Teloloapan, pero emigró a la CDMX, cuando tenía 18 años, para enfocarse a la fotografía, un oficio predominantemente masculino.
En 1908 retornó a su lugar de origen para instalar un gabinete fotográfico en su casa, le asistía su hermana Dorotea. Trabajaban fotografía de estudio y documental.
En tiempos revolucionarios no únicamente la insurrección maderista fue documentada por Sara Castrejón, también fotografió contingentes zapatistas y anti Huertistas, incluida, la capitana Carmen Robles «La Costeña».
Familiares y oficiales le solicitaron fotografiar fusilamientos, también documentaría la trasformación de su pueblo natal como la construcción del tramo carreteo entre Teloloapan e Iguala.
En 1937 tuvo la oportunidad de retratar al presidente Lázaro Cárdenas en su estudio, luego se harían dueñas del único cine habido en Teloloapan. A finales de la década de los 40’s se trasladó a Ixcateopan, donde capturó imágenes del supuesto hallazgo del tlatoani mexica Cuauhtémoc, en una exploración dirigida por Eulalia Guzmán.
Sara Castrejón dejó un muy vasto legado de 600 imágenes, al morir el 4 de noviembre de 1962.