Fotografía de KFF
Kaiser Family Foundation (KFF), organización sin fines de lucro con sede en California, en su última encuesta mostró que el 54 por ciento de los adultos estadounidenses directa o indirectamente han sido afectados por un incidente vinculado con un arma de fuego, como presenciar un tiroteo, ser amenazado o herido con un arma; incluso, hablaron de personas conocidas que fueron asesinadas por arma de fuego.
Al cuestionarles sobre su propia experiencia personal, uno de cada cinco (21%) refiere que ha sido amenazado con un arma, mientras que casi la misma cantidad (17%) señala que ha sido testigo de un disparo contra alguien.
En relación a integrantes de su familia, aproximadamente tres de cada diez adultos (31%) dicen que tienen un miembro de la familia que ha sido amenazado con un arma, en tanto que, una proporción similar (28%) indican que algún familiar ha atestiguado un disparo de alguien. Uno de cada cinco adultos (20%) alude que un miembro de la familia ha sufrido algún tipo de lesión con arma de fuego; mientras que, el 19% dice que un integrante de la familia ha sido asesinado por un arma de fuego, incluida la muerte por suicidio, según la encuesta.
La cual, también reveló que tres de cada cuatro adultos en hogares con armas dicen que al menos una está desbloqueada, cargada o guardada con municiones.
Resultados arrojan que las lesiones y muertes vinculadas con armas de fuego, así como las preocupaciones sobre la violencia armada, afectan desproporcionadamente a las personas de color en Estados Unidos.
Tres de cada diez adultos negros (31%) han presenciado personalmente a alguien recibir un disparo, al igual que una quinta parte de los adultos hispanos (22%). Un tercio de adultos negros (34%) tienen un miembro de la familia que ha sido asesinado por un arma de fuego, el doble de la proporción de adultos blancos que refieren lo mismo (17%).
Asimismo, un tercio de adultos negros (32%) y adultos hispanos (33%), se dicen preocupados diariamente de que ellos mismos o de alguien que aman sean víctimas de violencia armada. Entretanto, solo uno de cada diez adultos blancos exhibe preocupación por este asunto.
La encuesta se efectuó del 14 al 23 de marzo en línea y por teléfono en inglés y español, entre una muestra representativa a nivel nacional de casi 1,300 adultos estadounidenses. Y fue publicada un día después del tiroteo en el Old National Bank Louisville, Kentucky, que dejó seis personas muertas, incluido el tirador.
