La estadounidense, cinco veces olímpica, es la rider más condecorada en la historia del snowboard cross internacional, pero nunca había llegado a subirse a lo más alto del podio en unos Juegos de Invierno. Le han acompañado Chloe Trespeuch (plata) y Meryeta Odine (bronce).
Por Marta Martín
Nunca se ha rendido, y finalmente, a la quinta ha ido la vencida.
Lindsley Jacobellis, de Estados Unidos, ha conseguido la medalla de oro en la final femenina de snowboard cross en el día 5 de los Juegos Olímpicos de Invierno Beijing 2022, el 9 de febrero de 2022, en una competición que ha tenido lugar en el Genting Snowpark.
Y, de esta manera, el snowboard ha parecido devolverle todo lo que ella había dado a este deporte. Los de Beijing 2022 han sido para Jacobellis, de 36 años, los quintos Juegos Olímpicos. Es la única rider (hombre o mujer) que ha competido en todos los Juegos Olímpicos de Invierno desde que el SBX debutó en el programa olímpico en Turín 2006. Precisamente logró su mejor resultado olímpico entonces, con una plata. En sus siguientes Juegos no logró subirse al podio.
Y esta vez, ha podido volver a él, por todo lo alto: con el oro olímpico; un oro que le ha alzado como la snowboarder (hombre o mujer) más mayor en conseguir una medalla olímpica en este deporte.
Tras ella se ha situado en el podio Chloe Trespeuch, de Francia, medallista de bronce en Sochi 2014 y quinta en PyeongChang 2018. La francesa, subcampeona del mundo en 2017, llegaba a Beijing 2022 como una de las favoritas, al encabezar en estos momentos el ranking de la Copa del Mundo. El bronce lo ha logrado Meryeta Odine, de Canadá, quien ha sido la sorpresa del evento.
Aunque en los Juegos Olímpicos de Invierno Jacobellis no hubiera podido imponer su ley todavía, la rider estadounidense siempre ha sido la gran referencia del snowboard cross femenino en el circuito internacional. Ha ganado el título del Campeonato del Mundo en cinco ocasiones, dos veces el Globo de Cristal y los X Games en ocho ocasiones. Con todos estos logros, es la atleta en snowboard cross más condecorada de todos los tiempos.
Y en Beijing 2022 ha subido a lo más alto de un cielo que todavía desconocía: el Olimpo.