Golden State Warriors querían hacer llegar un claro mensaje a Memphis Grizzlies en Navidad, y en verdad lo enviaron con gran fortaleza y precisión. Hoy los derrotaron por 122-109 en el Chase Center, para lograr una marca de 13-2 esta temporada.
Grizzlies habían mostrado una confianza desmedida esta semana, y los Warriors les recordaron que siguen siendo los campeones, en tanto que, Memphis nunca ha superado la segunda ronda. Sin Stephen Curry ni Andrew Wiggins, el elenco californiano se midió a los Grizzlies, equipo que contaba con toda su fuerza con Desmond Bane y Jaren Jackson Jr., en la alineación. Golden State controló el duelo de principio a fin.
Jordan Poole, quien fue expulsado por una segunda falta técnica cuestionable a mediados del último cuarto, lideró el trayecto con 32 puntos. Klay Thompson, por su parte, agregó 23 puntos.
Draymond Green lideró una defensiva de Golden State que se enfocó en cuidar la línea de 3 puntos, donde Memphis disparó solo 9 de 39. Asimismo, Golden State se impuso bajo la tabla..
La banca de suplentes de Golden State ha sido un problema durante toda la temporada, pero su profundidad se hizo latente en esta ocasión, con Jonathan Kuminga, Ty Jerome, Anthony Lamb y Moses Moody entregando minutos de buen rendimiento, James Wiseman; inclusive, estuvo bien en defensa durante sus ocho minutos de juego. Donte DiVincenzo, titular en lugar de Wiggins, tuvo un muy buen rendimiento al lograr 19 puntos y cinco triples.
