Al recibir a una delegación de estudiantes italianos este 16 de marzo, el Papa Francisco pidió que pensaran en los muchos niños y jóvenes que están sufriendo por la guerra en Ucrania.

“Ahora les pido que piensen, que hagan una reflexión: pensemos en tantos niños y niñas, chicos y chicas que están en guerra, que están sufriendo hoy en Ucrania. Son como nosotros, como ustedes: 6, 7, 10, 14 años y ustedes tienen un futuro por delante, una seguridad social de crecer en una sociedad en paz. En cambio, estos pequeños, incluso muy pequeños, tienen que huir de las bombas. Están sufriendo mucho. Con ese frío que hace allí… Pensemos”, les dijo el Santo Padre en la Basílica de San Pedro del Vaticano.

En esta línea, el Santo Padre invitó a pensar “en estos niños, en estas niñas, en estos chicos, en estas chicas” que “hoy están sufriendo; hoy, a 3 mil kilómetros de aquí”.

“Pidamos al Señor. Yo haré la oración y ustedes con su corazón, con su mente, recen conmigo”, invitó el Papa.

Luego, el Pontífice con los ojos cerrados recitó esta oración espontánea: “Señor Jesús, te pido por los niños, las niñas, los jóvenes, las jóvenes que están viviendo bajo las bombas, que ven esta terrible guerra, que no tienen comida, que tienen que huir dejando su casa, todo. Señor Jesús, mira a estos niños, a estos jóvenes: míralos, protégelos. Son las víctimas de la soberbia de nosotros, los adultos. Señor Jesús, bendice a estos niños y protégelos”.

Además, en un discurso de saludo al grupo de estudiantes y profesores procedentes de un instituto educativo de Milán, el Papa les dio dos consejos: compartir y acoger; y les pidió repetir en voz alta y aprender ambas palabras.

El Papa les dijo que “la paz, de la cual tenemos tanta necesidad, se construye artesanalmente a través del compartir”, porque “no existen máquinas para construir la paz, no, la paz siempre se hace artesanalmente. La paz en la familia, la paz en la escuela… ¿Y cómo artesanalmente? Con mi trabajo, con mi compartir”.

Asimismo, subrayó la importancia de acoger al prójimo, porque “el mundo de hoy construye muchos muros entre las personas” y los resultados son la exclusión y el descarte.

En este sentido, el Papa lamentó el fenómeno del acoso escolar, conocido también como intimidación o con el término en inglés bullying, y alentó a los jóvenes a crear siempre puentes, porque “con el descarte inician las guerras”.

Antes de despedirse, el Santo Padre rezó un Ave María e impartió a todos la bendición.