- Esta obra, de más de 2 metros de alto y 5 metros de largo, se mostrará por primera vez al público a partir del miércoles 27 de abril
La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal) presentan en el Museo del Palacio de Bellas Artes, por primera vez, la última obra mural de la creadora Rina Lazo, titulada Xibalbá, el inframundo de los mayas.
La obra, de más de 2 metros de alto y 5 metros de largo, se encuentra en la Sala Internacional del máximo recinto cultural, bajo el concepto curatorial de la historiadora del arte e investigadora Dina Comisarenco, a partir de hoy, 27 de abril al 24 de julio de 2022.
Se presenta como un homenaje a la creatividad, determinación y talento de la pintora, reconociendo al mismo tiempo sus convicciones y anhelos de justicia social, y el aporte de las mujeres artistas al movimiento muralista mexicano.
A tres años del deceso de la pintora, grabadora y muralista de origen guatemalteco Rina Lazo (1923-2019), se recordará a una de las principales figuras protagónicas del medio artístico mexicano y partícipe de diversas luchas sociales del siglo XX.
Durante la ceremonia inaugural de la exposición, que se llevó a cabo la noche del martes 26 de abril, en representación de la secretaría de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero, la subsecretaria de Desarrollo Cultural, Marina Núñez Bespalova, destacó que, en este lugar emblemático, inaugurar el mural de Rina Lazo es un acto reivindicativo hacia las mujeres muralistas que formaron parte del gran movimiento artístico con el que se ha reconocido a nuestro país.
“Junto a los nombres de José Clemente Orozco, Rufino Tamayo, Roberto Montenegro, Juan O’Gorman, Arturo García Bustos, Diego Rivera y David Alfaro Siqueiros, nunca deben faltar los de Aurora Reyes, Olga Costa, Elena Huerta, Fanny Rabel, Marion y Grace Greenwood, Electa Arenal, Valetta Swann y, por supuesto, Rina Lazo”.
Guatemalteca de nacimiento, pero mexicana de vida y mesoamericana por convicción, fue una de las protagonistas de la lucha social posterior a la Revolución Mexicana que encontró en el arte y en sus creadores a uno de sus grandes aliados, añadió.
“Pronto se convirtió en aventajada discípula de Diego Rivera, su mano derecha decía él, con quien hizo varios murales. Su fascinación por el mundo maya hace eclosión en el mural Xibalbá, pero quizá comenzó a alimentarse desde sus fantásticas reproducciones de los murales de Bonampak que podemos ver en la Sala Maya del Museo Nacional de Antropología, por encargo del arquitecto Pedro Ramírez Vázquez. En el mural que veremos hay registro de su infancia: las grutas de Candelaria cerca de Cobán, la cocina, la música, el baile, el cultivo y, sin duda, el Popol Vuh, el libro sagrado de los mayas envolviéndolo todo. Rina Lazo nos ha dejado los frutos de su obra poderosísima y profunda que vence a la muerte”, dijo Núñez Bespalova.
Al evocar la trayectoria de Rina Lazo, la directora general del Inbal, Lucina Jiménez López, afirmó que se convierte en la primera mujer muralista de quien se expone su mural, Xibalbá, el inframundo de los mayas, en el Museo del Palacio de Bellas Artes.
“Hoy estamos cumpliendo con ese compromiso a la palabra del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura y de la Secretaría de Cultura para que este museo reciba esta exposición, en momentos en que México celebra el centenario del muralismo”, indicó.
Recordó que Rina Lazo fue una mujer comprometida socialmente en su época, fue militante del Partido Comunista y asoció su obra creativa con un compromiso social, pero también hizo una construcción importante y su nombre está asociado a la defensa del patrimonio cultural.
Señaló que le debemos esta memoria de lo que significa una visión contemporánea, una postura política, un concepto que ella construye desde toda su biografía cultural y artística, pero también desde un posicionamiento muy claro.
Respecto al mural, en el cual la artista manifiesta tanto sus vivencias en Cobán, como su lectura del Popol Vuh, señaló que, “lo que hace es permitirnos conocer ese mundo que en la sociedad occidental se ve como algo exótico, extraño, que es susceptible de ser conocido”.
En la inauguración de la exposición, la titular del Inbal mencionó la colaboración con varios creadores, pero sobre todo que finalmente se constituyó a sí misma en una artista sumamente importante que obtuvo reconocimientos no solo en Guatemala y México, sino también en varios países en donde contribuyó con su obra artística.
Al agradecer a Rina García Lazo, el abrir la puerta al Centro Nacional de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico Mueble (Cencropam). “Fue emocionante ver cómo el mural podía cobrar vida y cómo podría encontrarse aquí en esta nueva morada para generar esta exposición. También reconoció la labor comprometida del Museo del Palacio de Bellas Artes, así como de Amigos del Museo y de la Fundación Jenkins”.
Por su parte, la arquitecta Rina García Lazo -hija de los artistas plásticos Rina Lazo y Arturo García Bustos-, destacó que este fue un día muy especial para ella y para sus dos hijos, “porque vemos culminado el sueño que tenía mi mamá de ver su mural en el Museo del Palacio de Bellas Artes. Creo que ha sido un esfuerzo grande por todas las instituciones, y agradeció el apoyo de la Secretaría de Cultura, especialmente a Alejandra Frausto, así como a la titular del Inbal, Lucina Jiménez.
Cuevas de la Candelaria y “Popol Vuh”, fuentes de inspiración
Para la geografía del inframundo, la artista se inspiró en algunos recuerdos de su infancia, especialmente en una visita que hizo a las cuevas de la Candelaria, cerca de Cobán, en Guatemala, mientras que para las escenas y personajes su fuente de inspiración principal fue el Popol Vuh, libro sagrado de los mayas. El escenario es una cueva que remite al inframundo, lugar que representaba la muerte y la enfermedad y que, tanto para el pueblo maya como para la misma muralista, eran considerados parte natural del ciclo de la vida y no como un castigo.
Con una visión actual que hace honor a la trayectoria y a la postura política de la artista, el concepto curatorial de la muestra, a cargo de Dina Comisarenco, propone decolonizar la visión occidentalizada de la cosmovisión maya que comúnmente desvirtúa algunas de sus creencias originales.
Con motivo de los 100 años del muralismo mexicano, esta exhibición invita a recuperar la memoria histórica, reconocer la variedad estilística y temática del muralismo, además de mostrar la participación e importancia de las mujeres como integrantes activas en este movimiento.
Luego de obtener una beca en 1946 por parte del Ministerio de Educación Pública de Guatemala, Rina Lazo viajó a México para continuar con sus estudios de arte y, a la par, tuvo la oportunidad de trabajar como asistente del muralista mexicano Diego Rivera. Además, se desempeñó como docente y junto con su esposo, el también reconocido artista Arturo García Bustos, perteneció a algunas de las agrupaciones más trascendentes del país, como el Taller de Gráfica Popular, el Frente Nacional de Artes Plásticas y el Salón de la Plástica Mexicana.
Su obra se caracteriza por tener como eje rector la búsqueda de la trascendencia humana y el sentido de comunidad por medio del reconocimiento de lo sagrado, tanto en la naturaleza como en la vida humana, dejando entrever no solo su talento y gusto por el estilo realista, sino también su genuino interés por el mundo artístico y mítico de la cultura mesoamericana, con la que siempre se sintió cercana.
Xibalbá, el inframundo de los mayas está acompañada por una publicación digital realizada con el apoyo de la Fundación Jenkins, en la cual se incluye el ensayo de Dina Comisarenco, Coincidencias y consonancias: el mundo maya y la pintura mural de Rina Lazo, la iconografía del mural (lista de 25 detalles comentados), así como una breve biografía y cronología de la artista.
Con el fin de acercar a diversos públicos a los contenidos de la muestra se realizará un programa de actividades que ofrecerá una experiencia significativa a través de contenidos educativos, un espacio de diálogo y reflexión de forma integral. Se contará con un video de las cédulas en Lengua de Señas Mexicana, cédulas en lengua náhuatl (variante del centro alto) y cédulas en maya k´iche, así como elementos audiovisuales y virtuales, una línea del tiempo y una infografía con algunos elementos iconográficos del Popol Vuh.
Las visitas se desarrollarán con estricto apego a las medidas de protección, las cuales consisten en la instalación de un filtro sanitario con aplicación de gel antibacterial, revisión de la temperatura que no rebase los 37.5ºC y uso obligatorio de cubreboca.
La información sobre la exhibición y sus actividades complementarias se puede consultar en la página web del Museo (http://museopalaciodebellasartes.gob.mx/
Primer museo de arte en México inaugurado el 29 de noviembre de 1934 con el nombre de Museo de Artes Plásticas. A partir de 1968, las salas de exhibición del Palacio se conocen como Museo del Palacio de Bellas Artes.
museopalaciodebellasartes.gob.mx
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