- Ante la contingencia sanitaria, resulta pertinente dar continuidad a la creación de las artes vivas, afirma Sandra Govill, directora del colectivo
En un momento de contingencia sanitaria mundial y en el cual hay una nueva relación entre el individuo y su cuerpo, más que nunca resulta pertinente dar continuidad a la creación de las artes vivas, afirma la bailarina y coreógrafa Sandra Govill Villavicencio, directora del Colectivo Beznei, que enfoca su trabajo en la exploración teatral del movimiento corporal.
Ante la COVID-19, el colectivo ha recurrido a distintas vías digitales y formatos a distancia para mantener contacto con su público y seguir presentando sus trabajos. Cuando los semáforos sanitarios lo han permitido y siguiendo las recomendaciones de las autoridades, la agrupación se ha reunido en espacios abiertos para mostrar algunas de sus obras.
En entrevista, Govill Villavicencio comenta que, en el año 2014, en compañía de la también bailarina y coreógrafa Freda Barrera, con quien compartía el objetivo de poner en práctica sus ideas coreográficas y experimentar el arte escénico, decidieron fundar el Colectivo Beznei, en Cuernavaca, Morelos.
“Ella tenía una búsqueda con la antropología y la etnografía, y yo tenía una búsqueda más hacia la exploración marcial y teatral. Así se mantuvo el colectivo con trabajos de base tanto de Freda como míos”, no obstante, agrega, la colaboración de ambas terminó en 2018, cuando Barrera se mudó a Hungría; desde entonces trabajan con proyectos de Villavicencio.
Explica que Beznei ―palabra inventada por ambas artistas que significa bestia danzante―, tiene un enfoque de creación interdisciplinar, danza en espacios no convencionales, improvisación escénica, interacción con el espectador y desarrollo de proyectos en distintos sectores sociales.
Agrega que el nombre ejemplifica la esencia de la agrupación: ser una bestia no terrorífica, sino “que trasciende la humanidad absoluta y palpable, es la posibilidad de ser todo o ser nada; que puede estar a disposición del espectador para imaginar o descubrir nuevas posibilidades o nuevos mundos, esa es la idea de la bestia que danza, y es la búsqueda, principalmente”.
El colectivo cuenta con cinco artistas que participan constantemente; sin embargo, el número se amplía dependiendo del proyecto. A la fecha, tienen un total de ocho obras, seis performances y cuatro proyectos de video.
Desde el 2017, la agrupación colabora activamente con la compañía Zappulla DMN (Italia) para difundir el método Danza Movimiento Naturale y, desde el 2019, con Hekatômbe Producción Artística. En su trayectoria, se ha presentado en escenarios de México, Canadá, China, Italia, España y Hungría.
Para conocer más sobre el trabajo del colectivo, puede consultar su Facebook: /Beznei.