María Rojo debió haber sido la última gran diva del cine mexicano, pero no tuvo tiempo para eso. El cine que hizo, las y los directores con los que trabajó y las historias que contó, le impidieron el enigma; por el contrario, le exigieron una presencia más rabiosa e inmediata. En cada uno de sus espléndidos personajes, levantó la voz, convocó a la rebeldía, experimentó con júbilo su sexualidad y exigió igualdad ante sus contrapartes masculinas.
María Rojo es una presencia fundamental para entender el cine mexicano contemporáneo; es por eso que, en el marco del Día Nacional del Cine Mexicano, celebramos su trayectoria con una retrospectiva. Las películas que conforman este homenaje son: