En el Allianz Arena se enfrentaron el Bayern Munich contra el RB de Salzburgo, en un partido donde de principio a fin dominó el equipo local, de 16 remates a 8 fueron a puerta hasta el minuto 83, cuando los locales consiguieron su sexto gol del cotejo. El primero de ellos fue obra de Robert Lewandowski al 12′ de penal, 9 minutos más tarde, también desde los once pasos marcó el segundo, pero todavía no se acomodaba el rival, cuando el propio Robert ya había marcado su Hat-Trick, pasaron 8 minutos y Serge Gnabry hizo el cuarto de los locales que seguían conservando el balón en sus dominios, pero lo malo para los visitantes no era que la pelota estuviera en poder visitante, lo complejo era cómo evitar el sencillo tránsito de la misma que estaban dando por el campo; y, por encima de todo, la verticalidad con la que podían hacer sus jugadas.
Al descanso se fueron con la ventaja de 4-0 los dirigidos por Nagelsmann.
Regresando la tónica del partido continuaba, saques de esquina a favor de los locales, cualquier cantidad de pases precisos, y gol de Thomas Müller al 54′, de esta manera, parecía que se esperaba una goleada por demás estrepitosa en contra del Salzburgo.
Pero el ritmo local hacia el frente fue disminuyendo en cuanto a su intensidad; incluso, la visita descontó por medio de Kjaergaard al 70′; sin embargo, otra vez Müller al 83′ y al 85′ Leroy Sané, completaron la aplastante victoria del Bayer por 7-1.