Fotografía de WENP
Bryan Christopher Kohberger, de 28 años, según funcionarios estatales y locales y documentos judiciales, era estudiante de posgrado de la Universidad Estatal de Washington, quien fue arrestado el viernes en su estado natal de Pensilvania por los asesinatos perpetrados el mes inmediato anterior de cuatro estudiantes de la Universidad de Idaho, los hechos acontecieron en una casa fuera del campus, pero constituyeron un ataque brutal que cimbró a una pequeña ciudad universitaria, dijeron las autoridades.
El jueves se presentó una denuncia penal que acusa a Bryan Kohberger , de 28 años, de cuatro cargos de asesinato en primer grado, así como de un delito grave de robo, precisó, Bill Thompson, fiscal del condado de Latahen durante una conferencia de prensa llevada a cabo el viernes por la tarde en Idaho.
Autoridades dirigieron su enfoque a Kohberger después de rastrear su Hyundai Elantra blanco visto en el área de los asesinatos, según dos fuentes policiales informadas sobre la investigación. El ADN de Kohberger también se comparó con el material genético recuperado en la casa fuera del campus donde los estudiantes fueron privados de la vida a puñaladas, conforme a información vertida por las fuentes.
La genealogía genética ayudó a los indagadores a identificar al sospechoso, informó una fuente con conocimiento del caso. El ADN hallado en Idaho se tomó a través de una base de datos pública para localizar posibles coincidencias para los integrantes de la familia. Una vez que se encontraron posibles coincidencias familiares, labores de investigación ejecutadas posteriormente por fuerzas del orden, condujeron a la identificación de Kohberger.
El sospechoso se desplazó a través del país en el automóvil blanco hasta la casa de sus padres, según versiones emitidas por otra fuente policial. En algún momento, antes de Navidad, había la posibilidad de que este individuo se estuviera o fuera a Pensilvania, citó la fuente a CNN.
Entre las aseveraciones realizadas, también se dio a conocer que, un equipo de vigilancia del FBI en Filadelfia, lo había estado rastreando durante cuatro días en la zona donde fue arrestado, Mientras era vigilado, investigadores del Departamento de Policí, la oficina de homicidios de la Policía Estatal de Idaho y el FBI trabajaron con los fiscales para establecer una causa probable para obtener la orden judicial. Una vez emitida la orden de arresto, la Policía Estatal de Pensilvania y el FBI se enfocaron en el arresto.
James Fry, jefe del Departamento de Policía, hizo saber en conferencia de prensa que se había localizado un Elantra, pero que los investigadores seguían buscando el cuchillo utilizado en los asesinatos. No dio pormenores sobre el caso, incluso cuándo el sospechoso se convirtió en el foco de la indagatoria o si conocía a los cuatro estudiantes asesinados.
“Estos asesinatos han sacudido a nuestra comunidad y ningún arresto traerá de regreso a estos jóvenes estudiantes. Sin embargo, creemos que la justicia se encontrará a través del proceso penal”, acentuó Fry.
Las personas asesinadas fueron identificadas como Xana Kernodle, Maddie Mogen, Kaylee Goncalves y Ethan Chapin.
