Fotografía de presidencia.
Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta de México, encabezó el acto previamente referido, desde Nezahualcóyotl, Estado de México. A continuación se presenta el discurso de la mandataria en forma íntegra:
Muy buenas tardes a todos, a todas. ¡Arriba las mujeres! Muchas gracias.
Muchas gracias a Adolfo Cerqueda por recibirnos en Neza.
A nuestra gran gobernadora Delfina Gómez, que queremos tanto, gracias, gobernadora.
A nuestras compañeras presidentas municipales electas.
A las compañeras que son parte del gabinete.
Muchas gracias, sobre todo, a todas y a todos ustedes por recibirnos.
Cuando llegamos, les dije que íbamos a seguir muy cerca, que no iba a haber divorcio, que no iba a haber abandono de la cercanía que dejó el presidente López Obrador entre el pueblo y el gobierno. Es nuestro gran maestro y por eso el gobierno que estoy encabezando a partir del 1º de octubre es un gobierno de la Cuarta Transformación de la vida pública de México.
Ustedes saben que estamos viviendo desde el 2018 un cambio muy profundo en nuestro país. Antes del 2018 hubo gobiernos que se dedicaron a gobernar para unos cuantos, para una minoría, para los de arriba, hasta que en 2018 el pueblo de México dijo ‘basta’, y llegó la Cuarta Transformación.
¿Qué quiere decir la Cuarta Transformación?
Ustedes me van a decir cuál fue la primera gran transformación de nuestro país: la Independencia de México.
Fíjense, este año 2024 estamos viviendo 200 años de la Constitución de 1824, la Constitución que nos hizo República, que constituyó a los estados de la República; que hizo un gobierno, el primer gobierno democrático, electo.
Después de la Independencia vino Iturbide, que desapareció el Congreso y se quiso convertir en monarca, en emperador. Y los independentistas de entonces, Vicente Guerrero, Guadalupe Victoria, dijeron: ‘No, no peleamos tanto tiempo para ser una monarquía; México es una República’. Y entonces llegó el primer presidente de México, Guadalupe Victoria, el 10 de octubre de 1824.
Eso es lo que representa la primera gran transformación, la Independencia. Nos independizamos de la Colonia, de la Corona española, dejamos de ser colonia y nos convertimos en un país independiente, soberano. Ahí hubo una guerra casi de 14 años, hasta que llegó la República.
Después, viene la segunda transformación, también en el siglo XIX. El gran exponente de la segunda transformación, de la Reforma, es Benito Juárez García. Él, junto con otros liberales, decidió que nuestro Estado, nuestro gobierno, debía de ser un gobierno civil; que estaba bien que existiera la religión, pero que la religión era una cosa y el Estado, el gobierno era otra cosa. Entonces, la Reforma separó la Iglesia del Estado. Como dice o decía el presidente López Obrador: ‘Al César lo que es del César y a la Iglesia lo que es de la Iglesia’. Separó la Iglesia del Estado e hizo un gobierno civil, eso fue la segunda transformación.
También, hubo una guerra, la guerra de Reforma, y esa guerra de Reforma representó también sangre, muerte, pero triunfó la Reforma.
Después de eso, vino la intervención francesa, y también Juárez luchó contra esa intervención y ganamos la segunda independencia de México. Esa es la segunda transformación.
La tercera transformación es la Revolución mexicana, la primera revolución social del siglo XX, antes de cualquier otra, y le dio a los campesinos la tierra; a los obreros, dignidad; hizo que el petróleo fuera de la nación, de las mexicanas y de los mexicanos.
Después, vino Lázaro Cárdenas, que consumó esa Revolución mexicana.
Y después, vino, de 1982 hasta el 2018, un periodo que se llamó el periodo neoliberal.
Hasta que llegó el gran dirigente de la Cuarta Transformación, el presidente Andrés Manuel López Obrador, en el 2018, y cambió todo de manera pacífica, pero representó un movimiento social que llegó al gobierno y en realidad fue un gobierno del pueblo, para el pueblo y por el pueblo. En vez de ver a unos cuantos vio al pueblo de México.
Ahora, en el 2024, cuando terminó el gobierno del presidente López Obrador, pues llegó un nuevo gobierno. Pero desde la campaña yo les dije que representábamos dos cosas principalmente:
La primera, la continuidad de la Cuarta Transformación, porque nosotros no vamos a traicionar nuestros principios, sabemos de dónde venimos para saber a dónde vamos, cuál es nuestro movimiento, cuál es la esencia de lo que es nuestro gobierno.
Y lo segundo, tiempo de mujeres, porque por primera vez en 200 años llegamos las mujeres a gobernar México, porque no llego sola, llegamos todas.
¿Qué quiere decir la continuidad de la Cuarta Transformación?
Pues quiere decir que continuamos gobernando con los mismos principios.
¿Cuáles son algunos de ellos?
El primero:
Por el bien de todos, primero los pobres. Somos gobiernos que dejaron de mirar a los de arriba y comenzamos a mirar a los de abajo, a los que siempre estuvieron olvidados, olvidadas. Y, fíjense lo que pasó: cuando se apoya al pueblo, cuando se apoya al que menos tiene, resulta que al país, a todo el país le va mejor. Eso quiere decir: por el bien de todas y todos, primero los pobres.
Demostró el presidente López Obrador que cuando la economía se riega desde abajo, como los árboles, florece un árbol, florece todo el país. Por eso vamos a seguir gobernando con ese principio por ética, porque es justicia, pero, además, porque da resultados.
El segundo:
No puede haber gobierno rico, con pueblo pobre; es decir, erradicar la corrupción, que es lo que da recursos para el desarrollo.
Además, el gobierno tiene que vivir en la justa medianía, como decía Juárez. Nada de que los gobernantes andan con guaruras, en camionetotas, que no se acercan al pueblo; porque ni va a regresar el avión presidencial, ni va a regresar el Estado Mayor Presidencial, ni van a regresar los privilegios de los gobernantes; vamos a seguir gobernando con humildad y con sencillez. Los recursos del pueblo son del pueblo.
Y el tercer principio:
Con el pueblo, todo; sin el pueblo, nada; es decir, el principio de la democracia. Por eso ahora, fíjense lo que quiso el pueblo: quiso que no solamente ganáramos la Presidencia, sino también la mayoría calificada en la Cámara de Diputados, en la Cámara de Senadores, en la mayoría de los Congresos locales, y por eso el próximo año vamos a elegir a jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Porque con el pueblo, todo; sin el pueblo, nada.
Esos son los principios fundamentales con los que vamos a seguir gobernando.
Pero, además, continuidad en la Cuarta Transformación quiere decir que vamos a continuar con todos los Programas del Bienestar, todos: pensión universal a las y los adultos mayores; apoyo a los jóvenes de preparatoria; apoyo a los jóvenes de universidades de escasos recursos; la pensión; el apoyo a las personas con discapacidad; Sembrando Vida; Jóvenes Construyendo el Futuro; fertilizantes para el campo. Todos esos programas se van a mantener, pero, además, los vamos a llevar a la Constitución para que todos sean derechos del pueblo de México.
Ahora no nos vamos a quedar ahí; ya sería suficiente, pero no nos vamos a quedar ahí. Yo prometí y me comprometí con ustedes a tres Programas del Bienestar más:
El primero, apoyo a todas las mujeres de 60 a 64 años de edad. ¿Por qué a las mujeres? Porque no debería ser así, porque los hombres también deben de participar en el trabajo del hogar, todos, pero ¿quiénes somos las que principalmente nos dedicamos al trabajo del hogar? ¿Quiénes cuidamos a los hijos y a las hijas? ¿Quiénes estamos pendientes de que la casa esté limpia, esté ordenada, que haya comida? ¿Quiénes cuidamos a veces hasta a los maridos? Llegamos a los 60 años, ya los hijos ya están grandes ¿y ahora a quién cuidamos? A los nietos. ¿Quién reconoce ese trabajo? Pues como llegó una mujer presidenta, ahora reconocemos el trabajo de las mujeres mexicanas y, al llegar a los 60 años, un apoyo.
Vamos a iniciar en 2025 con las mujeres de 63 y 64 años que ya se están registrado y poco después lo vamos a ampliar, 60 a 63. Vamos a iniciar de esa manera, pero vamos a cumplir con todas, 60 a 64, y al cumplir 65 su pase automático a la Pensión para el Bienestar de los adultos mayores. Ese es el primero.
El segundo programa nuevo de Bienestar: vamos a darle beca a todas y todos los niños que van a escuela pública, a todas y a todos, una pequeña beca que les ayude a los útiles, a los uniformes, que sea un apoyo también para las madres de familia.
¿Cómo vamos a empezar?
Con las y los jóvenes de secundaria. Entonces, ahora, a partir de la próxima semana, va a haber asambleas en todas las secundarias públicas, ahí se va a informar de los apoyos, cómo van a ser, y en el 2025 todas y todos los jóvenes de secundaria van a tener su beca. Y después, ya nos vamos a primaria y al preescolar. Ese es el segundo apoyo.
El tercer apoyo, vamos a fortalecer, a consolidar, a seguir apoyando a las y los adultos mayores. Ya se acordarán que decían que no importaba quién ganara, que iban a seguir los Programas de Bienestar. Puro cuento, porque nada más ganamos y sacaron la casta, ya dijeron los de los otros partidos que en realidad ellos nunca querían apoyar a los Programas del Bienestar, que ellos no creen en eso, que ellos creen que hay que dar… ¿Cómo dicen? Hay que aprender a pescar y no hay que dar el pescado. Pues sí, pero eso genera muchas diferencias, nosotros enseñamos a pescar, pero también damos el pescado, porque nosotros, por el bien de todos, primero los pobres.
Y entonces, fíjense, en campaña decía yo, ellos no creen en el apoyo a los adultos mayores, no creen en eso. Nosotros pensamos, como los pueblos originarios, que las y los adultos mayores son los que nos aconsejan siempre; es más, son héroes y heroínas de la patria, porque sacaron adelante a sus familias, a sus pueblos, a la nación.
Y por eso vamos a fortalecer el programa que hizo el presidente López Obrador. ¿Cómo? Pues resulta que vamos a llevar la salud a las casas de todas y todos los adultos mayores. Ya nuestros compañeros servidores, servidoras de la nación están pasando a la casa de todas y todos los adultos mayores, se está haciendo un censo para saber de su salud; entre octubre y diciembre tocan a sus casas —para que lo sepan— y ahí les van a hacer un cuestionario largo para preguntarles qué problemas de salud tienen, si usan medicamentos permanentes, etcétera. Bueno, esa es la primera parte.
La segunda parte es que este mismo año vamos a contratar a alrededor de 21 mil enfermeras, enfermeros, médicas, médicos de las comunidades, a Neza, pues le toca a las enfermeras de Neza. Y a ellas las vamos a capacitar, van a traer su mochila con todo.
Y a partir de enero van a comenzar a visitarlos, van a tener una visita mensual o bimensual, dependiendo de la salud de cada uno de ustedes, y ahí les van a tomar siempre, pues todo su análisis, si están bien del corazón, si están bien de lo que requieren.
Y después, después de eso, si requieren un medicamento, van a tener la posibilidad de recetarles el medicamento para que vayan de manera gratuita a recoger ese medicamento. Y a mediados del próximo año vamos a ir construyendo poco a poco, a un lado de los Bancos del Bienestar, una Farmacia del Bienestar para que las y los adultos mayores vayan ahí a recoger sus medicamentos de manera gratuita.
Por supuesto, vamos a seguir fortaleciendo el IMSS-Bienestar, los centros de salud, los hospitales, todo lo que se requiera para fortalecer lo que yo llamo los derechos del pueblo de México. Porque durante mucho tiempo nos dijeron que la educación no era un derecho, que era un privilegio; que el acceso a la salud no era un derecho, era un privilegio.
Por eso, Seguro Popular. ¡Cómo que Seguro Popular! Es un derecho del pueblo de México, no es un seguro.
Entonces, vamos a fortalecerlos al mismo tiempo de estos tres Programas de Bienestar, que van a ser una realidad a partir del 2025. Por eso hablamos de la continuidad de la Cuarta Transformación de la vida pública.
Y también dije que era tiempo de mujeres, porque el que llegue una mujer a la Presidencia… Yo dije: es presidenta con ‘A’, no es presidente, es presidenta, ¿por qué? Porque lo que no se dice, no existe, y no es lo mismo presidente que presidenta. Y eso es para todas las mujeres, porque, así como hay presidenta en la Presidencia de la República, pues también ahora hay presidentas en el salón de clase, todas las mujeres, todas las mujeres son presidentas en su casa, todas las mujeres son presidentas en la calle, presidentas en el trabajo.
Porque por años nos dijeron que éramos menos. ¿Cierto o no? Nos decían de chiquitas:
-No, mira, hijita…
-Mamá, yo quiero ser ingeniera.
-No, no, no, esa es carrera para hombres. Tú, enfermera o maestra.
Que ya habían ganado espacio ahí las mujeres, pero nos decían: ‘Pues solamente te tocan ciertos oficios, ciertas…
-Que quiero ser policía.
-No, mijita, eso es para hombres, cómo vas a ser policía.
-Que quiero ser bombera.
-No, mijita, cómo vas a ser bombera, eso es para hombres.
No, pues las mujeres podemos en todos lados: podemos ser policías, podemos ser bomberas, podemos ser abogadas, ingenierías, astronautas; todo podemos ser las mujeres. Ya, que nunca más en la vida nos digan: ‘Calladita te ves más bonita’; eso ya no, eso es del pasado, las mujeres tenemos, tenemos derechos. Y sólo así vamos a ir acabando con el machismo, con la discriminación, porque las mujeres tenemos derecho a tener todos los derechos y también particularmente los derechos de las mujeres. Por eso digo que no llego sola, que llegamos todas las mujeres a la Presidencia de la República.