Hoy se celebró una ceremonia en Verviers, cerca de Lieja, una de las ciudades más afectadas por el desastre. Las inundaciones a lo largo del río Vesdre se cobraron muchas vidas y destruyeron varios edificios.
Estuvieron presentes el rey Felipe de Bélgica, el primer ministro Alexander De Croo y el ministro presidente valón, Elio Di Rupo.
Bélgica observó este martes un día nacional de duelo para rendir homenaje a las víctimas de las mortíferas inundaciones del miércoles y jueves pasado en el país.
Se entiende que la destrucción provocada por las inundaciones está relacionada con el desbordamiento de una presa en el valle de Vesdre, que provocó que el río Mosa, permítase ser redundantes, se desbordara durante miércoles y jueves.
Los expertos dijeron que el clima extremo, que trajo tres días consecutivos de lluvias torrenciales a Bélgica, agravó aún más el problema causado por las inundaciones.
A las 12 del mediodía, la gente guardó un minuto de silencio para honrar a las víctimas y sus familias mientras las banderas ondeaban a media asta.
Con información de Xinhue.